Mi experiencia en hostels de europa

Sección especial de Eurostream, quiero contarles qué me han parecido los lugares en los que estuve. No siempre fueron hostels, también varias casas de amigos y conocidos, con lo cual es corta la experiencia pero es destacable. Estuve en 4 hostels diferentes.
El primero fué Girona, la gente de Equity Hostels me recibió bien, a un precio bastante económico, unos 16 euros la habitación con un completo desayuno. Te cobran la toalla 2 euros y tienen máquina expendedora para los que tenemos insomnio. Realmente me enamoré de ese hostel y esa ciudad, el edificio muy nuevo y tuve compañeros buena onda. En general la gente se quedaba un día por lo tanto estaban siempre de paso, yo me quedé 3. Lo único que se complicó fué dormir sin aire acondicionado, había que dormir con la ventana abierta y a la mañana entraba la luz.

El segundo hostel fué en Barcelona, no habia conseguido lugar porque no reservé y terminé en un hostel adentro de un edificio sobre la calle Ronda de la Universitat y Carrer de Balmes, con lo cual no se el nombre (corrijo, es este http://www.alternative-barcelona.com/ACYH/Welcome.html ). Ahi me atendió un hombre en una oficina llena de cosas y lo último que me dijo fué el precio, con lo cual no me gustó porque salía 31 euros la noche, y 36 la de los fines de semana, pero negocié un poco y me dejó a 31 todas.

El tema fué que me enviaron a otro edificio donde era otro hostel ya que estaban asociados. No me dió mucha confianza la verdad, el que me atendió era italiano y parecía que no entendía nada, no tenía lockers para la valija, solo habia espacio en unos chiquitos. Luego me enteré que el hostel era muy nuevo y no tenían mucha experiencia en el asunto.
Finalmente encontré que la gente del hostel era amable y resultó muy tranquilo, me dejaron lavar la ropa y mis compañeros daban charla. A pesar del precio no daban desayuno, eso fué medio malo, pero era muy tranquilo y acogedor. De hecho una de las chicas que atendía era Argentina y estuvo bueno hablar con alguien de mi país.
La primer noche dormí bastante mal, no habían encendido el Aire acondicionado, ya que lo tienen centralizado. A la segunda noche por suerte quedó prendido y fué mejor.

Como me había gustado el hotel en Girona, reservé unas noches en el Equity Hostel de Barcelona Centric. Tienen 3 sucursales, y la del centro es la más práctica. Se puede reservar por internet y es más barato, 18 euros por noche.

De primeras estuvo todo mal, pensé que me iban a cobrar el wifi, pero por suerte no. Te cobran la toalla igual que en el otro, pero lo absurdo es que te dan gratis la sábana de abajo y la cubre almohada, pero la de arriba te la cobran 2 euros. Yo no entiendo que les cuesta.
Las habitaciones son de 12 o 14 personas y si bien está bueno que tengan una lámpara cada una, no hay enchufes cerca para cargar tus cosas. Ni hablar que debe haber unas 10 habitaciones por piso y solo un baño con 2 duchas por sexo. Haciendo cuentas, puede llegar a haber más de 100 personas con 2 duchas, saquen sus conclusiones.
El lugar es lindo como el otro pero te tratan muy mal. Será que vienen muchos extranjeros del norte que se la pasan gritando y haciendo bardo en el lugar en común. Pero son muy duros y poco acogedores en la atención.

Tienen reglas absurdas como que la cocina la cierran a las 22hs y uno que está acostumbrado a cenar tarde está en el horno. Pero detrás de eso está el negocio de la barra que tienen, por lo tanto termina siendo un negocio y no un lugar para todos. De más está decir que me peleé con el barman porque no podía calentar mi comida y me contestó de muy mala manera. El perfil de los empleados de acá es de patovicas, y sinceramente no está bueno.
Si bien puede salir un poco más barato, si van a estar pocos días en Barcelona, no lo recomiendo, ya que uno no puede descansar y relajarse. Evidentemente no tienen consideración para los que necesitamos trabajar o descansar.
Si bien el hostel tiene alguien encargado de las redes sociales que ha sido muy amable cuando los elogié en Girona, cuando comenté mis problemas en twitter en Barcelona, no ha respondido, con lo cual me parece deplorable como community manager.
Bueno, parece ser que no soy el único opinando lo mismo. Si lo tuvieran en cuenta, sería muy buen hostel, son pequeños detalles que deben arreglar, pero muy importantes. De todas maneras, el desayuno es muy bueno.

El último hostel en el que estuve fué en Red Nest Hostel de Valencia. Este me ha salido bastante menos, unos 17 euros por día y pude reservar por teléfono. Valencia de por sí es mucho más tranquilo, pero el hostel tenía habitaciones de 6, lo cual es mas relajado y luego de las 2 de la mañana, no pasa nada más en la ciudad.
El hostel bien limpio, aunque pasé calor porque el A/C no era muy bueno, la cocina era bien grande y estaba abierta hasta tarde. Las toallas y sábanas eran gratis y los lockers adentro de los cuartos. También tenían una terraza muy linda, pero estaba lleno de alemanes e irlandeses que no paran de gritar, así que ni subí. El wifi me alcanzaba hasta la habitación, eso era un punto a favor.
Este hostel no ofrece desayuno pero el checkin es a las 11 de la mañana.

En fin, sé que no es la guía super grande, pero es mi experiencia y cualquiera que viaje, ya sabrá a donde ir.
Lo que recomiendo primero que nada es reservar. Y si uno quiere salir de fiesta, las ciudades grandes son lo que busca. Pero si son como yo que prefiero dormir bien y salir a caminar, ir a por ciudades o pueblos.
Algo que venimos charlando es que el país está plagado de alemanes, con lo cual fué muy molesto para mi, porque mi intención de hablar español fué medio boicoteada. Más vale conseguirse alguien que pueda alojarlos en casa y pueda mostrarle cosas típicas, es más divertido.

Antiguo Girona

Como les contaba, Girona es una ciudad antigua por la que atravesaron diferentes culturas y pueblos. Verán en las fotos las diferentes construcciones, sus murallas, catedrales de romanas y góticas, baños árabes y el pueblo judío. Ya que me gusta la historia, este pueblo me ha fascinado y no solo hay cosas antiguas muy bien cuidadas, también es una ciudad moderna que supo mezclar su arquitectura heterogénea con sus paisajes.

No solo la mezcla es arquitectónica, también gastronómica. Podemos encontrar entre sus callecitas las clásicas Pattiseries francesas o riquísimos helados, que asumo de procedencia italiana. Y buenos sandwiches de jamón crudo que tan famosos son en este país.

Pero si leyeron el último post sabrán todo lo que he pasado y no terminó ahí. Cumpliendo una semana en el viejo continente, de alguna manera solo, atravesando fronteras era imposible que no me afectara. Ayer mejoró el día, fuí a tratar de saciar mi adicción tecnológica y encontré el ipad que tanto trabajo me costó encontrar y volví para hacer un día tranquilo en el hostel. Aproveché la comodidad de esta ciudad para descansar y seguir con la aventura. Eso me trajo nuevas energías y hoy me levanté temprano para recorrer lo que me faltaba y mañana a la mañana poder partir para mi siguiente rumbo.

Estando acá me enteré que habrá un festival de artes digitales. Pero más adelante, así que al no poder quedarme, contacté a los invitados y mañana estaré viajando a Célra que está a 20 minutos de aqui para poder entrevistar a la gente de LABfábrica. Luego seguiré para Barcelona.
Aún resta resolver un gran problema, y que mi valija sigue rota, por lo tanto tendré que ver si aguanta hasta Barcelona para ser reparada o tendré que comprar otra. Porque sumado a eso, se siguen agregando artículos y ya no entran… ya veremos.

De Toulouse a Girona, dos pueblos pequeños en dos grandes paises

Día complicado el de ayer, tanto que ni llegué a escribir para ustedes.
Todo comenzó con mi partida de Paris, donde recorrí tanto que mi cuerpo estaba demasiado cansado, dejando malas energías por donde pasaba.
Así fué que me atrapó el miedo. Y esa noche no dormí, me acosté tarde y las 3 horas que tenía para descanzar las enfoqué en buscar una alternativa al viaje que estaba por hacer a la mañana siguiente.
No la encontré y me convencí de que más allá de mi mala premonición, debía partir para poder llegar a España.
Entonces agarré mi valija y salí a primera hora. Apenas fuera del edificio, la manija se rompió. Primera mala señal. Luego al subir al tren, se rompió la otra, ya estaba en camino, no iba a dar marcha atrás.
En el viaje a Toulouse intenté dormir sin mucha suerte. Unas 6 horas de viaje para llegar a un pueblo muy bonito, pero que me recibió mal.
Intenté llegar a un hostel que no salga demasiado caro, los hoteles cercanos a la estación costaban entre 40 y 60 euros. Así que tomé el metro hasta alguna estación que me indicaba el mapa que estaba el hostel. Nunca lo encontré.
Harto, decidí ir a la segura, quedarme en un hotel tranquilo y poder descanzar bien. Entonces regresé a la estación y me alojé en un cómodo hotel.

Luego de darme una ducha, ya que estaba transpirado de caminar bajo el sol por mucho tiempo, me fuí a recorrer la ciudad. A las pocas cuadras recibo el regalo de una paloma sobre un tejado, tercera mala señal.
Más allá de eso las callecitas y edificios antiguos me han encantado. En disposición de curvas, las manzanas iban sorprendiendo y confundiendo mi espíritu. Caminé todo lo que pude caminar, compré provisiones y al escuchar la última señal ( truenos amenazadores de una tormenta que nunca llegó) me convencí que lo mejor era volver y descanzar para el viaje que quedaba.
Así que eso hice, mientras comía un delicioso pero pesado Kebab y miraba el partido contra México.
Luego dormí plácidamente en una cama de hotel, hasta despertarme con buen tiempo antes de salir para poder acomodarme tranquilo y no andar corriendo.
Así es que hoy, tomé un tren rumbo a la frontera, La tour de carol. Y ahora viajo rumbo a Girona ya que me han convencido de que tengo que ir.

Por suerte ya del lado español me pude comunicar con las personas y una pareja de entrada edad me ha ayudado a encontrar el rumbo para llegar a Girona ( o Gerona como ellos la llaman).

Y eso escribí antes de llegar a España, pues que España me recibió mejor pero tampoco para tanto. De La tour de carol llegué a Granollers y de ahí me quise regresar a Girona, pero me confundí de tren, así que tuve que hacer otro transbordo.
A las 19 horas llegué a Girona, y me enamoré. Bajé de la estación y vi esa ciudad moderna pero con restos de medievalismo, mezcla de culturas de diferentes partes del mundo. La misma tranquilidad de Touluse y la prolijidad y buena onda de España.
Así que pensando en quedarme una noche, terminé pidiendo una habitación para 2 días en un hostel moderno y económico a la vez.

De lo poco que pude ver, encontré hermosas calles con bares y casas de piedras, una catedral en la cima con muchas murallas medievales. Realmente impresionante. Pero eso es lo poco. A lo lejos se vé un edificio imponente con razgos árabes, mañana investigaré. Por hoy, subo las fotos que saqué hasta la frontera, mañana las de Girona, no se las pierdan 😉

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