Save the Lab

Este es un post de reivindicación. Corto, pero preciso.
Hace unas semanas, salió a la luz la posible maniobra que estaría negociando la alcaldía de Madrid para dejarle el hermoso edificio de las Serrerías Belgas de MediaLab Prado, a Telefónica.

El MediaLab originó todo lo que soy. Fué inspiración para Estado Lateral, donde trabajé durante algunos años y que me permitió viajar a conocer cuando aún estaban en Plaza de las Letras. También intentamos hacer algo parecido en Buenos Aires con Enrique Avogadro, que no funcionó, pero cada uno siguió con su búsqueda (Ahora el CMD tiene su laboratorio, lejano a MediaLab, pero inspirado en sus orígenes).

El MediaLab-Prado, gracias a la difusión de sus contenidos y de sus encuentros por streaming, me permitió conocer a gente maravillosa, que inspiró a mi carrera, como Juan Freire o a José Luis de Vicente, por nombrar algunos. Me hizo conocer el concepto de pro-común, del que tanto escribí en mi blog. Me hizo realizar CityCamp, y crear Chiripa. El Medialab-Prado, es el espacio de innovación más representativo para el mundo hispano.

Defender los espacios públicos innovadores, es defender el futuro.
Algunos argumentan que la gestión privada igual es buena, pero no es igual de buena. Porque no se trata solo de los contenidos que se desarrollan, sino de los valores que se transmiten. Y un lugar abierto, como lo es ahora, es vital y necesario.

Para entender qué está pasando con el laboratorio, visiten savethelab.org

Smart-everything: SmartCityExpo a tope

La semana pasada se festejó lo que sería la convención más convocante sobre Ciudades Inteligentes, en Barcelona, que le ha puesto muchas fichas a este asunto.
En el SmartCityExpo han participado muchas ciudades del mundo. Desde Kansas, México, Córdoba, hasta Seuol, por solo nombrar algunas. En números, 7065 visitantes, 319 speakers, 82 paises, 1781 municipalidades.

La mayor expectativa sobre el evento era la presentación del CityProtocol, proyecto en el que varias ciudades vienen trabajando hace 6 meses y poco se sabía hasta ahora. Y poco se sigue sabiendo, porque ha sido la decepción del evento. El primer día nadie sabía muy bien de que se trataba, al final del evento nos había quedado claro que el proyecto es solo una intención de varias ciudades de ponerse de acuerdo en la implementación de políticas para las Smartcities, pero tampoco se sabe muy bien como funcionará esto. Y cuando digo varias ciudades Es que no son todas y llama la atención que falten algunas.

Las conferencias a las que he asistido fueron en general las que me interesaban a mi y casualmente no eran las más importantes para el evento, eso ya dejaba ver como priorizaban los contenidos. Además de la Smartcity Plaza junto con la zona de stands que era puramente comercial y un lugar donde se desangraba el concepto social de la vida en la ciudad a cambio de la idea de que la tecnología, en términos económicos y estadísticos, podría en algún futuro resolvernos la vida, el calentamiento global y la crisis.
Porque aquí en España, de lo único que se habla es de la crisis, y todos estamos preocupados, pero si gastamos muchos millones en sistemas inteligentes, vamos a ahorrar dinero. Un dinero que nunca tuvimos ni tendremos, en general es para todos por igual y esto no queda claro.
Como dijo Carlo Ratti en otra conferencia ayer, «esto se trata de ahorrar dinero, no de gastar más dinero».

Otra cosa que se trasluce desde el evento en si, es que con la cantidad de sistemas de parking, de luces inteligentes y proyectos de recolección de basura que hay en oferta, es claro que todas las ciudades que se entusiasmen con la idea de incorporarlos a sus infraestructuras, en el futuro se encontrarán con la falta de soporte técnico, compatibilidad y entramado de los datos con los que se está trabajando.

En muchas ocasiones me he acercado a preguntar qué pasa con los datos que se genera, y la mayoría de las empresas me han respondido que «se integra perfectamente con la plataforma del ayuntamiento o donde se necesite» y claro, de APIs abiertas nadie hablaba.

«Entonces, ¿SmartCity es sobre tecnología?», me ha preguntado Joaquin Braulio unos días después de la conferencia. Porque el gran tema es que por mas que ahorremos energía y tengamos sistemas hidráulicos de recolección de basura (lo he visto), las personas siguen consumiendo productos llenos de paquetes y papeles envoltorios, consumiendo agua embotellada y las empresas siguen pensando en RSE como forma de «hacer un bien a la sociedad».
Está más que claro que una parte de las SmartCities tiene que ver con resiliencia y sostenibilidad como forma de ecosistemas, y no de «implantes tecnológicos». No se resuelve ahorrando, se debe cambiar la cultura que hace 5000 años llevamos como costumbre de muchos malos hábitos.

Uno de los pocos items en que quedó como conclusión en el evento es la necesidad de reducir la huella de carbono. Bien! ¿No estamos hace años con eso? Pero parece que no han encontrado otro indicador más universal para medir el producto de esta tendencia. Y eso es un problema.
Y aquí la culpa es nuestra, donde los investigadores debemos profundizar más en indicadores y que no nos sigan vendiendo peras por manzanas. Creo que Boyd Cohen tiene un gran trabajo realizado en su SmartCity Wheel.

Movilidad + Urbanismo = Land use

El gran tema que aqueja a muchas ciudades, siendo una de ellas Buenos Aires, es lo que se conoce como Commuting, el viaje de tu casa al trabajo.
En Hong Kong por ejemplo se tarda 11 minutos, teniendo 10 millones de habitantes, pero en México DF se puede tardar hasta 4hs, en Buenos Aires 2hs con 3 millones de habitantes.
Eso no solo genera un gasto de energía grande, sino que también se considera que a partir de los 30 minutos de viaje se disminuye mucho la calidad de vida de las personas.

La clave según el estudio Gehl Architects, uno de los más avanzados en el tema urbanismo, es programar la densidad del uso del suelo -Land Use Density-. Porque según ellos «la movilidad es cuestión de comportamientos, las personas hacen lo que le conviene para llegar mejor de un punto al otro de una ciudad».

En este sentido, Jlubljana (capital de Eslovenia) ha sido un caso de éxito en el SmartcityExpo. Talvez sorprendió porque nadie conocía la ciudad antes, pero vimos como varias políticas han sido benefactoras para el desarrollo de su ciudad y que ha sabido mezclarlo con implementación tecnológica. Proyectos como la prohibición de cualquier tipo de transporte motorizado en el centro de la ciudad con el servicio de biking, que a la vez usa una tarjeta llamada URBANA que sirve para todos los servicios incluyendo los containers de basura, etc.
Pero nuevamente vemos que este tipo de proyectos está funcionando muy bien en ciudades que son pequeñas, con solo 270.000 habitantes, tal como fué el caso de Curitiba en Latinoamérica.
Mientras que en Bogotá donde luego de 11 años, el Transmilenio, sistema de transporte BRT, sigue teniendo problemas y poca aceptación en algunos sectores de la sociedad.

Mike Lydon nos habló de las tácticas urbanas, de su importancia en el prototipado de soluciones (tal como la peatonalización de la calle Broadway en NYC) para testear nuevas soluciones y generar estos cambios en la densidad del uso del suelo. Al mismo tiempo, esto incentiva a la participación y al compromiso ciudadano. ¿Cómo hacer que la gente se enamore de tu ciudad? El ejemplo de Grand Rapids Lip Dub es muy bueno.



«Corresponsabilidad compartida» es el concepto primordial para las ciudades si queremos que estan sean inteligentes, dijo Claudio Orrego Larraín el ex-intendente de Peñalolen (chile) y me pareció interesante. Otra forma de participación entre los diferentes sectores sociales.

Respecto a la capacidad de los gobiernos de hacer frente a las nuevas tendencias y al prototipado, New Urban Mechanics de la ciudad de Boston es una respuesta interesante. Un centro desarrollado para experimentar, y desarrollar aplicaciones que den respuesta a necesidades de los ciudadanos sin ver un riesgo político alto, y al mismo tiempo disminuir el riesgo de los emprendedores ya que «cuando están mal conectados con las personas indicadas, el riesgo aumenta». Por eso esta unidad gubernamental ayuda a conectar a la gente que tiene ideas, con las que puedan realizarlas y con quien tiene ganas de participar en una mejor ciudadanía.

Internet of Things y Open Data

La gran pregunta es ¿Qué hacer con los datos?. Por un lado hay un gran número de nuevos servicios disponibles, pero tenemos un déficit presupuestario. ¿Cómo podemos ser eficientes en el manejo de los datos?.
Por otro lado Andreas Lykke-Olesen nos dijo, «tenemos muchos datos sobre quienes van en auto, en que horas lo hacen, qué caminos toman, etc. pero no sabemos los argumentos por los cuales las personas cambiarían sus hábitos».

El miercoles pasado, con el grupo de IoT Madrid discutimos, a raíz de SmartCityExpo, ¿cómo se puede innovar usando tecnología pero sin depender de esta?. Es decir, ¿cómo cambiar los comportamientos de las personas y como actuar sobre la masa urbana de forma efectiva?.
Mi postura fué que si realmente queremos cambiar el comportamiento de las personas, debemos trabajar sobre los valores de las mismas. Y para modificar los valores y sus hábitos, se trata de que experimenten esos cambios. Por eso es importante la cultura del prototipado, pero al mismo tiempo tener en cuenta que las personas no cambian su parecer por tener más datos que nos digan que es lógico cambiar, sino que realmente «experienciarlo» y para eso hay que acudir a la creatividad y no a la tecnología. Aún hoy seguimos metaforizando procesos analógicos sobre los digitales, y dudo que como humanidad podamos salir de este paradigma.
Entonces, ¿vale la pena gastar millones en super sistemas o podemos innovar correctamente y hacer que las personas modifiquen su actuar para hacer ciudades más resilientes? Por ejemplo, disminuir la cantidad de basura, cambiar habitos de movilidad, etc.

Otro tema de importancia, son los nuevos objetos que se conectan (IoT o M2M) ¿Cómo hacer para conectarlos a todos? Aún no tenemos un protocolo que permita conectar diferentes dispositivos unos con otros. Talvez IPv6 será lo que permita que todos los objetos tengan una conexión única, pero no parece muy eficiente. Ni hablar del cableado, sino miren este ejempo de SmartHome.
Carlo Ratti, de SenseableCity Lab del MIT, nos dice «Todo será un sensor» y donde debemos hacer foto es cómo estos sensores conectarán con las personas. Él habló de IoToP (Internet of Things of People) y Rob Mcintosh nos contó de Metacity Interface, dos formas de repensar los ámbitos públicos, privados y personales. Hay demasiadas capas funcionando al mismo nivel, y hay que pensar cómo la tecnología reforma los espacios.
Cisco, por su lado, presenta Internet of Everything, como un ecosistema donde todo se conecta a través de una conexión distribuida, alegando que la centralización y el Cloud computing ya no son una opción.



El tercer problema de IoT es el real-time sensing. Muchos objetos pueden generar datos y almacenarlos, pero el gran reto es la respuesta inmediata, y por eso no podemos depender de conexiones a internet o a otros dispositivos. Por suerte con los nuevos dispositivos de Nanode o Raspberry pi, hay nuevas opciones para prototipar estos objetos. Este es otro argumento por el cual el Cloud computing no sería la respuesta.

Finalmente Alexandra Deschamps-Sonsino, de IoT London, quien a proposito tiene un hermoso proyecto de IoT Good Night Lamp, reflexionó acerca de lo inteligente (smartness). Y nos dijo que lo inteligente tiene que ver con el contexto, pues no todo es inteligente en todos los sentidos. Entonces ¿por qué no pensar en una inteligencia temporal?


En mi opinión, hay que comenzar a darle potencia a nuevos proyectos de IoT y trabajar en nuevos protocolos para que estos puedan unirse unos con otros. Así como funcionan redes como COSM, plataformas openSource donde se puedan recolectar y usar datos entre todos los ciudadanos. Grandes proyectos actuales son el Air Quality Egg o Smart Citizen.
Porque así como las computadoras llegaron a las casas, IoT será el nuevo paradigma para todos. Y si aún no lo parece, en 1984 el New York Times decía que las computadoras personales iban a ser un fracaso…

Ciudad como plataforma

Ya lo hemos escuchado varias veces, pero el concepto sigue siendo la clave. Y tiene que ver con abrir las puertas a un nuevo concepto de ciudad, donde el poder ya no está centralizado.
«Hemos podido comprobar que el reto no esta en las tecnologias, sino en los aspectos organizativos, de gestion y culturales», dijeron en el cierre del evento. Y es que están todos preocupados porque por primera vez se piensa que para lograr una SmartCity hay que colaborar entre los 3 sectores.
Y el gran problema es, ¿quién representa a la comunidad? ¿Quién representa a las ciudades?, lo cierto es que «los barrios cambian, nos gusta o no» y hay que estar a la altura.

mind the gap

Esteve Almirall nos dejó una reflexión interesante. Hasta ahora, todos los concursos de participación y de aplicaciones desde los gobiernos premian la mejor propuesta, dan recompensas por ello y motivan a través de la competencia, como si fuera que las personas no queremos mejorar nuestra propia ciudad. Esta idea debe cambiar y el valor de la participación en la construcción de las ciudades debe ser toda nuestra motivación. Pero esto va a suceder solo cuando los gobiernos sean realmente abiertos. Mientras tanto, el proyecto Adopt a Hydrant es un buen ejemplo realizado desde el New Urban Mechanics de Boston donde cada ciudadano se hace cargo del problema, que es de todos.

Business vs. Urbanism Smartcities

Volviendo al tema de fondo, ¿cómo vamos a alimentar energéticamente todos estos sistemas? Creo que estamos lejos de una respuesta para eso, las energías renovables son parte de la respuesta, pero la descentralización total es inminente y ahí es cuando los gobiernos centrales van a perder el poder y donde los sistemas super inteligentes manejados desde un panel, no tienen tanto sentido.
Aquí es donde yo creo que la idea de trabajo en redes interconectadas, donde se pierden los límites, donde se descentraliza el poder a causa de que todos necesitamos del otro para alimentar y subsistir se deja ver como un resultado obvio. Todos colaboraremos aportando datos de nuestros propios sensores, todos brindaremos energía a los sistemas eléctricos desde nuestros paneles solares, todos decidiremos qué futuro queremos en nuestra ciudades y estaremos obligados a ellos, con lo cual los ciudadanos inteligentes (smart citizens) tienen que despertar.
La energía nuclear, modelos de control como los de IBM, son modelos antiguos de centralización de energía e información que tienen su días contados.

Creo esencial trabajar en un City Protocol serio, en donde se asegure la libertad de los datos y su privacidad protegida. Pero ahora estamos en crisis donde se quiere controlar internet y el auge de la video-vigilancia hace ruido por todos lados, pero es solo latigasos del sistema que se ahoga en sus propios medios. iCity Project o CitySDK son algunas aproximaciones que parecen más interesantes en un primer momento.
El viernes pasado, realizamos con el grúpo IoT Barcelona un WalkShop. Una caminata ideada por Adam Greenfield para hablar sobre temas de seguridad y open data mientras se recorren las ciudades.
Hemos visto varios proyectos de «smartcity» que se intentaron implementar en la ciudad como prototipos, edificios inteligentes, sistemas de identificación entre otros no han sido más que un fiasco que por falta de presupuesto o fallas en su implementación, la mitad de ellos no están funcionales o presentan muchas fallas estructurales.
Entonces, ¿como podemos estar tan seguros de algo que cuesta demasiado dinero, sobretodo en tiempos de crisis; tiene un gran costo político y, por sobre todo, un costo social en donde el concepto de espacio público, bienes públicos y bienes comunes se ve afectado por estas nuevas capas tecnológicas?


Lo curioso de todo esto, es que Adam ya había adelantado mucho de este tipo de problemas y es evidente que todos estos gurúes de las SmartCities olvidaron leer Everyware: The Dawning Age of Ubiquitous Computing y ya pasaron 6 años de su publicación.
Es el momento de los consultores y especialistas nos reunamos y empecemos a trabajar enserio, porque parece que en otros ámbitos hay mucha intención pero están lejos de lograr algo que funcione. El tiempo es tirano.
Pablo Sanchez Chillón ha tenido una primer iniciativa abriendo un grupo de LinkedIn para discutir estos asuntos, pero todas las reuniones de comunidades en las ciudades son buenas para comenzar a trabajar. Es por eso que fomentamos realizar IoT Meetups o CityCamps para interconectar las experiencias y visiones.

Notas

Algunas soluciones que china quiere comenzar a trabajar, y que me parecen bastante más inteligentes.
Algo más sobre IoT como cambio social.
Nota sobre el evento New Cities Summit, que me parece que tiene mucho material relacionado. Y que me hace pensar que deberíamos buscar nuevas opiniones o bien, aceptar que estamos estancados.

Otras notas de amigos respecto al SmartCityExpo

Smart Citizens in the Data Metropolis, por Mara Balestrini.
It’s About the People, Stupid, por Boyd Cohen.
Le citta’, la City Protocol Society e la corsa al Far West, por Claudio Forghieri.
3 Problems With ‘City Protocol Society’, por Boyd Cohen.
Smart Open Cities? Thoughts from the Smart City Expo, por Julia Lopez Ventura.

buzz lightyear smart city

Desafíos para la industria (algunos gráficos que capturé)














Un recorrido por las nuevas ciudades inteligentes del viejo mundo, vuelve #EuroStream

En 2010 hice mi primer viaje a Europa, la excusa era asistir a uno de los eventos más grandes de diseño que se realizaba en París, luego me dediqué a recorrer y conocer los MediaLabs que estaban emergiendo en la península Ibérica.
Hoy estoy partiendo a Londres, Barcelona y Madrid pero con un nuevo paradigma, las ciudades inteligentes.

Asistiré al SmartCityExpo, el mayor encuentro de ciudades, y luego estaré conociendo varios proyectos que se están llevando a cabo para mejorar la vida de las ciudades.
Al mismo tiempo, estaré difundiendo el trabajo que estamos desarrollando con CityCamp y el nuevo proyecto Adhocracia.

Por supuesto estaré publicando lo que voy viviendo y lo que me parece relevante de aquí al 25 de noviembre!

Cerrando Eurostream

Este es el último post de Eurostream, hasta nuevo aviso.
Por lo tanto, quiero dejarles el video resumen de cosas que filmé y algunos números y conclusiones sobre el lifestreaming que hice durante un mes.

Yo creo que tuvo sus consecuencias buenas y malas. Algunos se cansaron de leerme, otros en cambio me recomendaban lugares a donde ir o cosas para hacer. Mi familia se quedaba tranquila al saber que yo lo estaba disfrutando y estaba bien.
El objetivo principal era compartir las vivencias, curiosidades y cosas que me iban pasando en el viaje. Traté de potenciar mi observación en la vida de las personas a donde iba y tratar de exponerlo para que todos puedan vivir, de alguna manera lo que yo estaba viendo en vivo. Si bien me hubiera gustado enviar videos en tiempo real, todavía la tecnología no está preparada para eso, con lo cual recurrí a las fotos y comentarios.

Algo que no esperaba es la constancia respecto a los reportes. La idea nació antes de viajar y aprovechando mi plan de BB internacional, pero no esperaba escribir y subir las fotos todos los días, aunque la última semana bajé el ritmo para poder descansar antes de volverme.

En resumen, fué una experiencia rica. Me ayudó a no sentirme solo en algunos momentos por más de que algunos piensen que soy un enfermo al estar siempre conectado. Espero poder hacer un nuevo stream en poco tiempo, ya sea europeo o de cualquier continente, total todas las sociedades son diferentes y hay cosas que ver y mostrar.

Espero que les haya gustado y servido de algo, si así fué, dejen sus impresiones en los comentarios, vale?
Gracias. Y ahora, el video:

MediaLabs y mi apreciación sobre las actividades culturales en España

Luego de visitar en diferentes ciudades a gente que está relacionada con las artes visuales, electrónicas y nuevos medios puedo plantear un escenario de la situación en España. Creo que a modo de conquistador, he logrado reunir estas opiniones y visiones de las actividades dentro del país de una manera que no se ha hecho, más que nada por la incomunicación que hay entre los entes y la parcialidad con la que ellos mismos pueden observarlo.

En líneas generales, todos los centros creativos que he visitado están financiados de una manera u otra por entes gubernamentales, o bien por fundaciones. Esto hace que hayan evolucionado y tengan apoyo constante para crecer al mismo tiempo que dispongan de un lugar, difusión y recursos para desarrollar actividades. Pero a su vez haya una dependencia constante y una cultura de bienestar que traba el desarrollo creativo de los artistas.

Otra de las observaciones que me resultan destacables, es el hecho en que Argentina tiene un potencial de creación cultural que resulta en una generación constante y en un ámbito de relaciones muy fluido. En lo que vi de España, se hacen muchas menos cosas. Los artistas esperan que alguna fundación o alguien les de una mano para hacer algo, y el artista amateur hace poco para difundir su obra.
El que conoce algo de Buenos Aires, sabe que abundan galerías, teatros, espacios multidisciplinarios que nacen diariamente. Los artistas se juntan para probar y fracasar mil y una vez. Y eso, creo yo es lo que hace a la creación. No se espera crear la gran obra, sino expresarse, crear miles.

El caso es que tanto el crecimiento de Estado Lateral y de Clandestina, en tanto unión de artistas audiovisuales y electrónicos, ha sorprendido a lo largo de mi recorrido. Justamente porque ambos se levantaron sin subsidios y con las autoridades dando las espaldas.
En varias oportunidades me han planteado que los modelos con que se crearon, no podrían funcionar aquí en España. No lo creo, es cuestión de dejar los prejuicios atrás y de crecer. Porque aquí es donde España debe crecer.

A su vez en latinoamérica han surgido en los últimos años, varios medialabs con el mismo formato de Estado Lateral. Y si bien eso es un orgullo, aún no se ha logrado algo híbrido. Por que el fin de un medialab tambien es aportar a la comunidad, y si bien en ocasiones hay aportes, yo considero que hay que llegar más al fondo.

Otro de los puntos importantes y que me hicieron sentir más cercano es la mirada al otro, seguir el camino de otro. Y esto ocurre en varios países.
Si bien no tiene sentido inventar la rueda dos veces, creo que la identidad y autenticidad se logra siguiendo el propio camino. Y en este punto quiero recalcar que parte de un medialab es dar respuestas, ya sean comunicacionales, culturales, tecnológicas o sociales.
Pero viendo el crecimiento globalizado que han tenido las ciudades, se asume que los problemas de una ciudad, son similares a las de otra. Por lo tanto las respuestas vendrían a ser las mismas. Y yo no veo nada más alejado de la realidad.

Si bien desde el siglo XV la unión y el parecido entre ambos continentes se han ido incrementando y por más que se diga que Buenos Aires parece una ciudad europea (porque en verdad se parece mucho) la cultura y la misma sociedad difieren en muchos puntos. Por esto es que digo que los caminos y las respuestas son diferentes, aunque las preocupaciones las mismas.
Entonces creo primordial, por un lado, crear una relación entre ambos países y cuantos más mejor, para compartir y complementar las actividades. Generar una fuente de información global para potenciarse, pero asumiendo cada uno su identidad.
Es decir, crear una forma de comunicación entre pares, no solo para potenciar sus acciones individuales, sino también para afirmarse cada uno y evitar la igualdad sin sentido.
Para nuestra suerte, en MediaLab Prado me han comentado que esto ya lo están formando, poco a poco, con el LabtoLab, una serie de encuentros entre diferentes MediaLabs de Europa.

Cultura es también calidad de vida, y esa es una gran preocupación que he visto por aquí. Proyectos de mejora medioambiental, de identidad con el barrio, de apropiación de los espacios, de creación y educación a las nuevas generaciones; son los que abundan. Gracias a que los espacios están subvencionados su preocupación ha ido girando para ese lado. Lo cual me parece muy importante ya que parte de la cultura es generar conciencia.
De hecho la sociedad, el gobierno y las empresas, tienen como objetivo el cuidado del medio ambiente. Por lo tanto el desprendimiento de proyectos en torno a esto es algo que se da como algo actual y naturalmente.
En Latinoamérica es diferente, aún el cuidado de nuestras cosas es algo lejano. Ya sea por nuestra historia o por nuestra realidad, pocos buscan respuestas de este tipo. Creo que esto es algo que debemos aprender porque año a año la violencia va creciendo y el entusiasmo de crear e invertir disminuye.

Otra dificultad que veo en los centros de España, es que no logran salir de la institucionalidad. Clandestina, formado por los propios artistas, logra estar en el epicentro del asunto y sus integrantes son los que forman el ámbito, de alguna manera. En cambio, aquí son instituciones y no salen de su institucionalidad, esperando que los «creadores» aparezcan.
Se limitan a ofrecer su espacio, sus recursos, sus redes. Pero siguen siendo ajenos. Eso, para mi es una gran traba que tienen, uno de esos estigmas que tiene la burocracia de los países del viejo mundo.
Si Lateral o Clandestina no se formaran haciendo, no serían nada. Nos validamos a nosotros mismos por las acciones, por existir.

Cerrando el análisis, son claros los objetivos a seguir y espero que podamos hacer en conjunto y también por nuestra cuenta una evolución. Creo que la misión a futuro es poder intervenir mucho más en las ciudades. Formar nueva gente, involucrar a diferentes instituciones y entablar una relación directa con la sociedad. Para esto, tenemos que aprender los unos de los otros.

Dialectos: España

En españa podemos encontrar muchas palabras y dialectos dentro del Castellano. Porque está claro que hay diferentes idiomas que se usan, tales como el catalán, el vasco, el gallego, etc. Pero dentro del castellano podemos encontrar diferentes palabras o formas de habla en las diferentes zonas del país.
Voy a tratar de dejar un resumen de las cosas que me han llamado la atención con su posible descripción a lo argentino, por lo pronto, no son todas pero son las que yo he escuchado.

Joder = Una expresión muy usada, no tiene un significado muy marcado.
Chaval = Chabón
Curro = Trabajo
Mogollón = Un montón, muchos
Mola = La rompe
Maja = Bonito, lindo
Tío = Boludo
Vale = Dale
Venga = Dale
Tronco = No se exactamente su significado, pero encontré esto: alcornoque, animal.
Pavos = Forma de hablar del dinero. 10 pavos, 50 pavos
Pijos = Chetos
Guiris = Extranjeros
Guay = Buena Onda
Que fuerte = Es una expresión con doble sentido, se usa para cuando te da impresión algo.
Lechuga icerberg = Lechuga mantecosa
Tomates verdes = Tomates redondos
Mahonesa = Mayonesa. Ver http://es.wikipedia.org/wiki/Mayonesa
Pitufo = Pequeño sandwich
Entrepans = Entre dos panes, un sandwich
Gazpacho = Es una sopa fría a base de tomate, pimiento y ajo
Salmorejo = Simil al Gazpacho pero con pan, lo que lo hace más espeso.
Caña = Pequeño vasito de cerveza, servido con mucha espuma, típico de españa con un pinche.
Peña = Tiene múltiples usos: Evento, reunión de gente, situación.
Pasta = Dinero
Flipar = Volverse loco, en ambos sentidos.
Voyera = Lesbiana
Yonkis = Cabezas
Hasta ahora! = Expresión que se usa mucho, al igual que «hasta luego» pero que es medio absurda
En plan = Es usada de diversas maneras. Una es «con la idea de» o planificando algo. Pero tambien se usa en expresiones como «Ibamos a la playa en plan deportista».
Coño = Es una expresión, donde la palabra significa el aparato reproductor femenino
Liarla = Hacer lío, bardearla
Acojonante = Espectacular, increible, asombroso
Y tal = Es una frase para rellenar, como decír «Fuí al mercado a comprar cosas y tal». Desconozco si tiene sentido, vendría a ser más usado como un «etc»

Recapitulando Eurostream

Estoy volviendo a Buenos Aires, estoy con sensaciones cruzadas. No soy bueno para los viajes, ni las idas ni las vueltas. Ahora todo es confuso, si fueron solo una experiencia, o pasará un «way of life» como dicen por ahí.

No lo se, espero que me esperen con los brazos abiertos y con paciencia. Porque no es que uno llega con todo para ponerse a producir. En mi caso, si bien quiero hacer muchas cosas y ponerme al dia, necesito bajar a tierra muchas vivencias que tuve. Pasarlas en limpio, para poder aprender mucho más y hacer de mi próximo viaje algo más provechoso.

Porque siempre me pasa, cuando conozco lugares nuevos, que no disfruto todo lo que debería por esa dificultad que tengo para adaptarme a lo que no conozco.

Realmente voy a extrañar muchas cosas. La libertad, primero que nada. El respeto, la tranquilidad y el estilo de vida del viejo mundo. A mis amigos, nuevos y viejos, es difícil pensar que no sabes si los vas a volver a ver.
Las ciudades, a las que me cuesta adaptarme pero luego me encariño. Como Madrid, Girona, Málaga y un par más.

Pero bueno, es lo que fué, por suerte todo ha salido bien, más allá de algún que otro disgusto, comprobé que puedo viajar solo todo un mes a un lugar desconocido. Pero a decir verdad, lo que más disfruté es estar con conocidos. Luego de irme de Paris, hasta llegar a Madrid, pasé por bastante stress.

Para mi es una prueba, que no es la primera ni será la ultima, para llegar a mi destino añorado, que es Japón.
Aún así no tengo apuro, me gustaría volver a Europa, terminar de recorrer España y conocer un poquito del norte. Espero que salgan excusas para poder volver pronto, ojalá en menos de un año.

Pero primero tengo otros destinos, obligados y recurrentes, como Santiago de Chile o Mar del Plata.
Si, me hice un viajero tremendo. No se si está bien, no se si es la mejor decisión, por que sé que estoy dejando que ciertas cosas se vayan corrompiendo también, y favores que voy pidiendo.

Pero sé que si no lo hago ahora, luego será más dificil, y también tiene para mi un valor único, porque aunque no lo crean para mi siempre fué muy dificil viajar, en el sentido emocional. Y poco a poco, poniendome a prueba, lo voy superando.

Para cerrar, algunos listados resumiendo algunas cosas que me quedaron.

Cosas que estaban en mis planes y no hice:
– ir a bilbao
– Comer una paella (mucho calor)
– Ir a granada
– Grabar entrevistas ( no me dió para todo)
– Casarme con una española (jojo!)
– Hacer dieta

Cosas que no esperaba y terminé haciendo:
– Conocer Toulouse, Girona, Celra y Barberá del Valles
– Comer Gazpacho
– Hacer que España salga campeón del mundo y estar en su festejo
– Dar el primer paso para conquistar el mundo
– Conocer tanta gente haciendo cosas copadas

Pero saben lo que más más añoro, y que me pegó cuando llegué a mi casa. Es vivir con amigos, o salir a tomar algo a la tarde.
Si bien en el estudio disfrutamos trabajar juntos y nos hacemos nuestras tardecitas de cerveza, no vivo en general con la costumbre de salir por la tardecita. Y tampoco tengo amigos que lo hagan, y siempre me da mucha pena, no poder llamar a alguien y decirle «vamos a tomar algo hoy?» y justamente no hablo de un grupo de amigos cerrado, sino de cualquiera que se me cruza por la mente.
Espero cambiar eso…

Porque a veces, hasta en mi propia ciudad me siento solo. Será por eso que viajo tanto?

Adiós Málaga

Me voy, se termina #eurostream y yo colgué con escribir. Solo porque quise tomarme unos días de vacaciones, ir a la playa y hacer esas cosas relajadas que no incluyen fotos ni escribir notas.
Les miento, si escribí, notas temáticas de profundidad que saldrán en la semana, pero ahora quiero contarles sobre esta ciudad.
Málaga es como lo más al sur de España, es una ciudad puerto con todo lo que conlleva. Es mas sucia, más pobres y también turística. Hay playita y mucho pescado frito, rabas y esas cosas. Además Málaga tiene casi 3.000 años, formada por los fenicios por su buena ubicación y geografía. Luego pasó por muchas manos, griegas, romanas hasta estuvo habitada mucho tiempo por musulmanes. Con lo cual tiene mucha mezcla y a cuanto a arquitectura, está muy bonita.

No hay que dejar de visitar la Alcazaba y el palacio Gibralfaro, construidos por los musulmanes en el siglo XI. También hay un teatro romano y una de esas catedrales imponentes. Pero Málaga es una ciudad pequeña, dicen que Granada, a solo hora y media en micro es mucho más imponente. Lamentablemente no pude ir a verla, queda pendiente.

Más allá de eso, lo que mas hice es ir a la playa y pasar mi tiempo con la pipu y su mujer Patri quienes me han tratado muy bien, haciendo cumplir mi objetivo que era descansar y recapitular un poco todo este tremendo viaje que tuve.

Mañana ya me regreso a Buenos Aires, con muchas cosas pendientes, cuestiones que activar y problemas que resolver. Vuelvo con la idea de volver, valga la redundancia. No solo porque me quedaron cosas para hacer sino también porque he logrado poner un pié en Europa en lo que a trabajo y relaciones se refiere, con lo cual espero que surjan excusas para volver.
Ahora a prepararme que tengo como 20 horas de viaje, en las cuales aprovecharé a seguir escribiendo para ustedes. Y editando fotos y videos pendientes. Saludos!